¿Qué pasa si fallece el avalista de un préstamo?
El avalista de un préstamo, ya sea por un préstamo de garantía hipotecaria o cualquier tipo de préstamo, es la persona responsable del pago de la totalidad de la deuda contraída. Esta circunstancia se da cuando el titular no se hace responsable de la deuda.
Pero, cuando nos preguntamos: ¿y si fallece el aval del préstamo? ,¿quién se hace responsable del pago de dicha deuda?. Te contamos todo lo que necesitas saber.
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¿Se extingue el aval personal por fallecimiento?
Para responder a esta pregunta, primero debemos tener muy claro que es la figura del avalista dentro de un préstamo con aval.
Un avalista es una persona o entidad, quien se compromete a hacerse caso financieramente del titular del préstamo en caso de que este no pueda asumir la deuda, no cumpla con sus obligaciones.
La figura de un avalista es muy importante, ya que muchos préstamos bancarios no son concedidos sin la figura de un aval solvente para adquirir liquidez. Estas situaciones se dan cuando el prestatario no tiene un buen perfil crediticio, por ejemplo, si el solicitante tiene un historial de crédito limitado, ingresos insuficientes, o falta de activos que se puedan usar como garantía.
Cuando fallece el avalista de un préstamo, la responsabilidad de garantizar el pago de la deuda no desaparece. Generalmente, lo que sucede es lo siguiente:
➖ Responsabilidad de los herederos:
En la mayoría de los casos, los herederos asumen su responsabilidad al aceptar su parte de la herencia. Por lo que pueden verse obligados a cumplir con las obligaciones del avalista, en caso de impago.
➖Renuncia a la herencia:
Los herederos pueden optar por rechazar la herencia para no asumir las deudas y así no atender las obligaciones del avalista fallecido.
➖ Garantías adicionales:
En algunos contratos de préstamo, puede haber cláusulas específicas que obliguen al prestatario a buscar un nuevo avalista si el original fallece.
➖ Revisión del préstamo:
Dependiendo del contrato del préstamo y de las leyes locales, el banco o la entidad financiera puede revisar las condiciones del préstamo tras la muerte del avalista, aunque no es común que esto afecte directamente al titular si sigue cumpliendo con los pagos.
En conclusión, el aval deja de tener obligación si la deuda ha sido saldada. Por lo que en caso de fallecimiento del avalista, son los herederos quienes recogen la deuda avalada. Tal y como lo recoge el artículo 657 del Código Civil: “los derechos a la sucesión de una persona se transmiten desde el momento de su muerte”.
Para entenderlo del todo, pongamos un ejemplo sencillo:
Si un padre avala a su hijo con el fin de que le concedan un préstamo y el padre fallece (aun siendo el avalista de dicho préstamo) y la deuda no ha sido pagada al completo, serán sus herederos (siempre y cuando se acepte la herencia) quienes responderán como avalistas del préstamo.
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Preguntas frecuentes:
¿Cuándo se extingue la figura de avalista?
¿Cuándo prescribe la deuda de un avalista?
El tiempo es indefinido: el aval no tiene una fecha de vencimiento. Un avalista deja de serlo cuando acabe su obligación de pago con la entidad o prestamista. Si hablamos de los plazos de prescripción para la reclamación de la deuda del avalista es de 4 años, pero las garantías deben mantenerse durante todo el tiempo en que la deuda sea exigible.
